El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, confirmó este miércoles las especulaciones sobre la autorización a la Agencia Central de Inteligencia (CIA) para realizar operaciones encubiertas en Venezuela. Durante su conferencia en la Casa Blanca, Trump también sugirió que podría lanzar ataques dirigidos contra los carteles de droga en el país sudamericano. Este anuncio ocurre en medio de un creciente enfoque militar estadounidense en la región del Caribe, con ataques a barcos sospechosos de tráfico de drogas.

La reciente serie de operaciones militares de EE.UU. ha involucrado al menos cinco ataques en las últimas semanas, resultando en la muerte de 27 personas, lo cual ha generado condenas de expertos en derechos humanos de la ONU, quienes califican las acciones como “ejecuciones extrajudiciales”. Trump reconoció abiertamente que las intervenciones están dirigidas principalmente por la lucha contra el narcotráfico y la creciente preocupación por la delincuencia organizada proveniente de Venezuela.

Operaciones encubiertas de la CIA: un paso más en la presión contra el régimen de Maduro

Trump declaró que la autorización de la CIA fue motivada por dos razones fundamentales. En primer lugar, el presidente señaló que Venezuela ha estado enviando prisioneros a Estados Unidos, lo que representa un riesgo para la seguridad nacional. En segundo lugar, destacó el flujo ilícito de drogas desde Venezuela hacia su territorio, un problema creciente para la lucha contra el narcotráfico.

Aunque las autoridades estadounidenses se han abstenido de detallar si las operaciones encubiertas de la CIA incluyen acciones para derrocar al régimen Nicolás Maduro, Trump subrayó que la situación en Venezuela requiere una respuesta firme de la comunidad internacional. De hecho, EE.UU. ha ofrecido una recompensa de 50 millones de dólares por información que conduzca a la captura de Maduro, al que el gobierno de Trump no reconoce como líder legítimo tras las disputadas elecciones de 2024.

La reacción del régimen de Maduro ante las amenazas de EE.UU.

El régimen de Maduro, por su parte, ha calificado las declaraciones de Trump como “belicistas y extravagantes”. En un comunicado oficial, el gobierno venezolano anunció que llevará la denuncia ante la ONU, buscando una condena internacional contra las acciones de Estados Unidos. Según el canciller venezolano, Yván Gil, Washington está intentando “legitimar un cambio de régimen” para apoderarse de los recursos petroleros del país.

Maduro ha intensificado las medidas de defensa, ordenando ejercicios militares en Caracas y otras zonas estratégicas del país. La vicepresidenta venezolana, Delcy Rodríguez, se mostró desafiante, advirtiendo a Estados Unidos de que el pueblo venezolano está preparado para defender su soberanía bajo cualquier circunstancia.

Tensiones crecientes y la estrategia estadounidense en el Caribe

El aumento de la presencia militar estadounidense en el Caribe, con el despliegue de barcos de guerra, submarinos nucleares y aviones de combate, es visto por muchos como parte de una estrategia para combatir el narcotráfico. Sin embargo, las operaciones en la región están exacerbando las tensiones entre ambos países, ya que Venezuela acusa a EE.UU. de intentar derrocar al gobierno y desestabilizar la nación.

A medida que el conflicto se intensifica, el régimen de Maduro ha tratado de mantener el control interno mediante la movilización de fuerzas armadas y la milicia civil, aunque la situación sigue siendo compleja y volátil.