Desaparición en Carabobo se ha convertido en el nuevo foco de atención nacional. La organización opositora Vente Venezuela ha denunciado el secuestro de cuatro miembros de una familia en el estado Carabobo y ha responsabilizado directamente al régimen de Maduro y a Diosdado Cabello por lo ocurrido. Este suceso ha desatado una ola de crítica política y exige una respuesta contundente.
Desaparición en Carabobo, acusaciones graves contra el régimen
Según el comunicado publicado el pasado 6 de septiembre, las víctimas fueron identificadas como Miriam Fernández Ruiz (72 años) y su nieto Miguel Ángel Guillén Ibarra (17 años). Ambos fueron detenidos el 4 de septiembre por funcionarios de la Policía Nacional Bolivariana (PNB) sin presentación de una orden judicial, en un domicilio de Paso Real en Carabobo, y trasladados a un destino desconocido.
Al día siguiente, Miguel Ángel logró comunicarse con su hermana Chantal (21 años), solicitándole entregar documentos que supuestamente permitirían su liberación. Chantal acudió, acompañada de su hija de dos años, Nicole de Los Ángeles Palermo, sin imaginar que ambas también serían desaparecidas dentro de las instalaciones policiales.
En el comunicado de Vente Venezuela se afirma que “secuestrar a una niña de dos años es un acto de cobardía y demuestra el miedo que sienten ante lo que representa una salida inminente del poder.” La organización opositora describe estas acciones como un claro ejemplo de terrorismo de Estado.
Reacción opositora y alarma internacional
Vente Venezuela responsabilizó directamente al fiscal Tarek William Saab, así como a Diosdado Cabello y al dictador de Maduro. Además, compara la acción con la práctica de “Sippenhaft”, una forma de represión utilizada para castigar a familiares de opositores y generar miedo político.
Asimismo, la organización llamó a la comunidad internacional a mantenerse alerta y pronunciarse ante lo que consideran una nueva violación masiva de los derechos humanos en Venezuela.
Silencio oficial y creciente preocupación
Hasta la fecha, no se ha emitido ningún pronunciamiento oficial sobre la situación de los cuatro detenidos ni se han aclarado los motivos de su detención. La falta de transparencia solo profundiza la sensación de inseguridad y la percepción de impunidad institucional.
Quizás le pueda interesar esta otra noticia:
“Ya lo descubrirás”: Trump no descarta atacar carteles de drogas en territorio venezolano”Contexto adicional: censura y represión informativa
Es importante enmarcar este caso dentro de un contexto más amplio: la censura en Venezuela ha escalado significativamente. En 2024, se reportaron bloqueos de más de 60 portales de noticias, incluyendo medios críticos como Cazadores de Fake News, Espaja, Tal Cual, El Estímulo, entre otros. Incluso plataformas como el Instituto Prensa y Sociedad (IPYS) fueron bloqueadas, y la red social X fue censurada durante periodos electorales. Esto refleja la sistemática limitación al acceso a la información y la opacidad del régimen.
Por qué importa “desaparición en Carabobo” para el país
- Violación de derechos humanos: la desaparición forzada es una grave violación contemplada en tratados internacionales.
- Represión política escalada: se evidencia un uso del poder coercitivo para intimidar a la sociedad y a la disidencia.
- Silencio oficial y control informativo: el cerco mediático reduce la presión social y la rendición de cuentas.
La desaparición en Carabobo no debe ser vista como un hecho aislado. Es una alarma roja que exige que la comunidad nacional e internacional exija respuestas claras, justicia y libertad. El silencio institucional y la represión informativa solo agravan la tragedia.