Crisis estructural en Portuguesa: 34 puentes al borde del colapso por falta de mantenimiento
El estado Portuguesa enfrenta una emergencia de gran escala debido al deterioro progresivo de al menos 34 puentes, que se encuentran actualmente en riesgo de desplome, según lo advirtió el gobernador regional Primitivo Cedeño este lunes 15 de julio.
Entre las estructuras comprometidas se encuentra el puente de Río Acarigua, ubicado en la troncal 005 del municipio Araure, una vía fundamental que conecta el occidente del país con el resto del territorio nacional. Esta alerta evidencia el abandono sistemático de la infraestructura vial, responsabilidad directa del régimen chavista, que por años ha ignorado el mantenimiento básico de estas obras clave para la movilidad y la economía del país.
Quizás le pueda interesar esta otra noticia:
👉 Estudiante de comunicación permanece preso por publicar críticas al régimen en redes
El temporal agrava una crisis que ya venía gestándose
Las lluvias recientes, intensas y prolongadas, terminaron de exponer la fragilidad de las estructuras que conectan a comunidades, centros productivos y corredores agrícolas de la región. El puente de Turén y los pasos de la zona alta entre los municipios Sucre y Unda también figuran entre los más afectados, según confirmó Cedeño.
“No solo tenemos carreteras y autopistas afectadas; los puentes están en condiciones críticas. En Peña Blanca estábamos construyendo cuatro puentes y perdimos completamente esos trabajos”, expresó el mandatario.
El colapso parcial o total de estas estructuras representaría una catástrofe logística y humanitaria para una región esencialmente agrícola, donde se transportan insumos, productos alimenticios y personas que dependen de estas conexiones para acceder a centros de salud y comercio.
300 familias evacuadas por riesgo de deslave
Cedeño también informó que al menos 300 familias de zonas rurales tuvieron que ser reubicadas debido a la amenaza latente de deslaves en sectores montañosos de Sucre y Unda. Muchas de estas personas fueron acogidas por familiares o comunidades vecinas ante la ausencia de refugios oficiales habilitados por el régimen regional.
La situación se agrava porque la mayoría de las rutas de evacuación también están comprometidas estructuralmente, lo que pone en peligro la vida de los habitantes y limita las labores de emergencia por parte de organismos como Protección Civil y los bomberos.
El campo también sufre las consecuencias
El gobernador reconoció que el impacto del temporal no solo es estructural, sino también económico, ya que la producción agrícola de Portuguesa se ha visto severamente afectada. De las 250.000 hectáreas de maíz proyectadas, apenas se alcanzará un 40 %, debido a que las lluvias impidieron la siembra en muchas zonas.
“Nuestros productores son unos guerreros y ya están buscando alternativas, pero la situación nos obliga a replantear todo el ciclo agrícola de este año”, expresó Cedeño.
En el caso de la caña de azúcar, se estima que unas 300.000 toneladas se quedaron sin cosechar porque las lluvias impidieron el acceso a los campos, aun cuando los centrales azucareros estaban en funcionamiento. Este golpe compromete el abastecimiento nacional y afecta directamente a pequeños y medianos productores del estado.
Falta de prevención y responsabilidad compartida
Aunque el gobernador intentó justificar la situación como una consecuencia del fenómeno climático, organizaciones ambientalistas y productores locales responsabilizan directamente al régimen chavista, por no haber invertido en infraestructura resiliente ni sistemas de drenaje funcionales.
Además, los constantes recortes presupuestarios, la corrupción y la centralización del poder en Caracas, han reducido la capacidad de reacción de los gobiernos regionales, que dependen enteramente del visto bueno del Ejecutivo nacional para ejecutar obras básicas.
“Los drenajes están colapsados, los puentes en ruinas y los productores abandonados. La excusa del clima no es suficiente cuando los daños se deben a años de desidia institucional”, señaló un vocero de la Federación Campesina de Portuguesa.
El llamado a la conciencia ciudadana
En su intervención, el gobernador también pidió a la población colaborar en la protección del medio ambiente, evitar lanzar basura en los drenajes y mantener limpia la ciudad.
“Hay que pensar qué planeta le vamos a dejar a las próximas generaciones”, expresó.
Sin embargo, para los ciudadanos, la conciencia ambiental no puede sustituir la acción del Estado, especialmente en un país donde las fallas estructurales ya son la norma y no la excepción.
Reunión con la Iglesia: diálogo frente a la crisis
Como parte de sus actividades, Cedeño sostuvo un encuentro con monseñor Alberto Ortega Martín, nuncio apostólico del papa León XIV, junto al obispo de la Diócesis de Acarigua-Araure, Gerardo Salas, y otras autoridades eclesiásticas y municipales. Aunque no trascendieron detalles concretos del encuentro, se presume que se abordaron temas relacionados con el impacto social del temporal y el rol de la Iglesia en la asistencia humanitaria.
Con información de:
Portuguesa Reporta